miércoles, 1 de diciembre de 2010

Cuando  a tus espaldas nada hay. Cuando el olor a desilusión se hace mas fuerte tras la puerta. Caminando por las veredas de una gélida tarde, dispuesto a decir la autenticidad, la verdad que más parece falsear todo lo real. ¿Cuándo la realidad es verdadera?, si todo lo real es mentira, nadie es absolutamente sincero, todos tiene algo que esconder, todos disfrazan sus emociones, opiniones y deseos con un verde mando de esperanzas y subterfugios mas seductores que la real verdad, esa que esconde miseria, pobreza, miedo, decepción y lujuria.

Nada hay detrás de las nubes azules del porvenir, ese que a ratos parece tan brillante, como el oro del progreso. Que hay mas allá??, detrás de mis manos???, que hay detrás de sus ojos???, al parecer no hay nada, miedo, desesperanza, confusión, quizás solo hay, carne y huesos. Pero continuo caminando por la calle, sin nada interesante que escuchar o ver, solo luces, militares corriendo, gritos, llantos, tenues lamentos de una apacible cacofonía de recelo. Hasta que encuentro el ángel, ese travestido por la fantasías del clero, el milagro de la humanidad hecha ascetismo. Me mira con sus ojos verdes, lentes de contacto celestiales que se vende a 5 almas el par. Con su espada mi apunta y me regala una capa, un cetro y un mapa. Para dirigir las fuerzas etéreas en la tierra. Para ser su teniente coronel, del regimiento de Dios que luchara la última gran batalla universal. Pero que, ya todo está perdido, todos lo que han viajado al sol, nunca más volvieron, ni siquiera volvió la victoria, menos aun el jubilo y jamás, la gloria.

Con la cara llena de decepción, rechazo sus divinos regalos y comienzo a correr, escapando de las balas, rayos y venéreas infusiones que lanzan las prostitutas. Me escondo en una casa cedida, llena de fenómenos, malformados y bestias de incierta reputación humana. Me saludan con sus manos envueltas en paños, gasas y ropa interior de núbiles vírgenes fugaces. Me sirven un plato de tallarines, llenos de garrapatas y polillas, bueno, no he comido en años.

1 comentario:

  1. Me gusta mucho como escribes,aunque nunca sé qué decirte. Entro y te leo y creo que cualquier cosa que diga estropeará tus textos.

    Me gusta mucho tu blog.

    Por cierto, has pensado en participar aquí
    http://poesiamas.net/ ?

    Puedes escribir cinco textos al mes y hay bastante movimiento allí.

    Un saludo desde España

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